En el año 1970, jóvenes cantantes, poetas y músicos, bajo el conjuro del arte y movidos por una singular necesidad de expresión- casi mágicamente- acudieron a “La tapera”, en la calle La Paz esquina Moldes, y decidieron cantarle a la vida y, al mismo tiempo, denunciar al poder instaurado que a sangre y fuego que reprimía la libertad de pensamiento. Así surgió el movimiento cultural Jenecherú. La música, la poesía y el sentimiento de rebeldía de los valientes integrantes fueron inspiración para la Orquesta Sinfónica Juvenil y su director Boris Vásquez. "Estas canciones surgen para cantarle al sol como la cigarra, después de años bajo la tierra", indica el músico, que da inicio a la actividad musical con su primera temporada del año.   

Espectáculo. Las presentaciones se desarrollarán el 22, 23 y 24 de febrero a las 20:30 en la Casa de Cultura "Raúl Otero Reiche".  Para este espectáculo se rescataron el espíritu de aquellos años. "Bajo su influjo bucearon adentrándose en el arte musical cruceño, más allá de las bellas canciones de la tradición; o de aquellas otras, las canciones que el mercado impone con su reproducción sistemática. Y descubrieron que algunas canciones de los ochenta mantienen su valor artístico; y que han permanecido otras canciones, ocultas, casi desconocidas, de gran valor musical y poético", destaca Vásquez. A este movimiento se sumaron escritores, periodistas, autoridades de universidades diversas, cantautores locales y de otros departamentos de Bolivia que luego serían famosos; gente de generaciones diversas, sensibles al arte y en actitud de lucha en procura de un mundo mejor.

Canciones que conforman el programa. El concierto iniciará con Numinosidad Nº 2, una composición de Franz Gustavo Terceros. Gabriel Revollo, “Pedro Shimose” Suite para coro y orquesta estará a cargo del coro Cantar Cruceño/UPSA, Dúo de Tres, cuatro canciones y poemas serán interpretados por María Elena Busso acompañada en la guitarra de Luis Fernández de Córdova y la poesía de Óscar Barbery. El talentoso músico Charles Suárez también forma parte importante de este espectáculo con las piezas Hoy la vi, Girón del Alma, Coplas Americanas, Primer Amor, Cruceño soy y No hay tierra como mi tierra. Con todo esta artillería musical y poesía será recordada el sentimiento de rebeldía de los integrantes del movimiento que no solo convocó a sus jóvenes integrantes, sino se sumaron escritores, periodistas, autoridades de universidades diversas, cantautores locales y de otros departamentos de Bolivia que luego serían famosos; gente de generaciones diversas, sensibles al arte y en actitud de lucha en procura de un mundo mejor. En la década del '80 el movimiento cultural, después de una existencia intensa, se disolvió. La joven democracia boliviana había sido conseguida. Los integrantes y participantes, muchos de ellos, desde sus lugares en la sociedad, continuaron sus luchas en pos de una democracia consolidada y de la equidad social, narra Vásquez. 

80 Músicos
Entre coro, orquesta y solistas saldrán a escena.

Punto de vista

"Rendimos pleitesía a un grupo de artistas, músicos y poetas"

Santa Cruz de la Sierra es actualmente la ciudad con mayor oferta cultural de Bolivia, la programación semanal es tan extensa que se hace casi imposible de seguir el rastro y mucho menos posible el asistir a cada una de estas interesantes propuestas. Muchos dirán que este suceso se debe a la ola migratoria y sus consecuencias, de seguro que en algo habrá influido en este proceso pero no debemos olvidar que en nuestra ciudad, y en todas épocas, siempre ha existido un movimiento cultural activo y muy bien representado por grandes personajes en todas las especialidades de las artes.  

Existen algunas teorías que atribuyen toda esta buena influencia a la llegada de los Jesuitas hace más de dos siglos atrás y otros sostienen que en Bolivia siempre existió un gran legado cultural el cual fue reforzado con la llegada de tanta gente europea en la época de la colonia.

En esta 1ª Temporada y como todos los años, aparte de homenajear a la música boliviana, sus creadores e intérpretes, estaremos también rindiendo pleitesía a un grupo de artistas, músicos y poetas, bolivianos y extranjeros que inspirados por esta hermosa región del país, han producido su arte en épocas no muy lejanas, (de los sesenta hasta la fecha) cargadas de vivencias extremas que sirvieron de motivación para fundar lo que hoy se constituye como parte importante del movimiento del Arte y la Cultura Cruceña.

Para los integrantes de nuestra orquesta que hasta la fecha ni siquiera han alcanzado la mayoría de edad, confrontarse con todas estas obras nacionales que han sido creadas en esta última mitad de siglo, es una vivencia totalmente nueva y enriquecedora porque en el intenso periodo de preparación, además de aprender respecto al contenido musical intrínseco, tienen la posibilidad de hablar respecto a las anécdotas de lo históricamente sucedido en cada una de estas agitadas décadas de nuestra historia.

Bienvenidos sean.

Boris Vásquez
Director de la  Orquesta Sinfónica Juvenil

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